Tres poemas de Robert Frost: El legado de un poeta. Post Plaza de las palabras.








Plaza de las palabras, presenta al poeta Robert Lee Frost, poeta y educador, uno de los más grandes poetas norteamericanos del siglo XX. Junto a Walt Whitman y Emily Dickison, constituyen uno tripleta formidable de poetas. En esta ocasión presentamos tres poemas muy conocidos de Frost, pese a su simplicidad aparente, enseñan grandes verdades de la existencia humana. En general la poesía de Frost esta condicionada por el paisajismo  y amor a la naturaleza, que le sirven de telón de fondo, y que como tal confraterniza   en su lenguaje, con  temas y personajes  comunes y corriente  del campo. A diferencia de Wordsworth, que parte de la naturaleza para encontrar al sujeto humano, en los poemas de Frost es el sujeto quien predomina y se funde con parte de la naturaleza. En Wordsworth hay un estado contemplativo de la naturaleza, la poesía de Frost es un estado reflexivo sobre la condición humana en el marco de la naturaleza. Pero ambos vienen de una misma tradición, la poesía inglesa que tiene sus orígenes la poesía celta y las tierras altas de Escocia y Gales. Y en ese tiempo la poesía, se componía  naturalmente en los bosques.

Pero el mensaje poético de Frost, pese a su candor de niño, y sus  algunas veces ambiguas y oscuras meditaciones sobre la vida, -el poeta Brodsky lo advirtió-, seguirá siendo universal. Dos años antes de su muerte, Frost fue invitado a una lectura y recitar un poema, en la toma de posesión del presidente John Fiztgerald  Kennedy. (1961). Para ese entonces Frost era un reconocido poeta que había recibido una medalla del congreso de EE.UU, lector de poesía del Congreso y de ser llamado el poeta-filósofo más grande de América.   El poema elegido fue The Gift Outright,  un poema que Frost había escrito muchos años antes, en el filo angustioso dela depresión, 1930 pero publicado hasta 1942, poema en verso libre;  pero también escribió uno especial para la ocasión Dedication, “For John F. Kennedy His Inauguration”), que al final no pudo leer por el mal tiempo. Pero se lo regalo a Kennedy con una dedicatoria. El poema ha  sido considerado, como el arte de gobernar poéticamente. El reino del poder y la poesía, una edad dorada. Visión con sabor un poco utópica a lo camelot. Poema  que  también incluimos en este post, pero solo en su versión original en ingles. 

DEDICATION

Summoning artists to participate
In the august occasions of the state
Seems something artists ought to celebrate.
Today is for my cause a day of days.
And his be poetry’s old-fashioned praise
Who was the first to think of such a thing.
This verse that in acknowledgement I bring
Goes back to the beginning of the end
Of what had been for centuries the trend;
A turning point in modern history.
Colonial had been the thing to be
As long as the great issue was to see
What country’d be the one to dominate
By character, by tongue, by native trait,
The new world Christopher Columbus found.
The French, the Spanish, and the Dutch were downed
And counted out. Heroic deeds were done.
Elizabeth the First and England won.
Now came on a new order of the ages
That in the Latin of our founding sages
(Is it not written on the dollar bill
We carry in our purse and pocket still?)
God nodded his approval of as good.
So much those heroes knew and understood,
I mean the great four, Washington,
John Adams, Jefferson, and Madison
So much they saw as consecrated seers
They must have seen ahead what not appears,
They would bring empires down about our ears
And by the example of our Declaration
Make everybody want to be a nation.
And this is no aristocratic joke
At the expense of negligible folk.
We see how seriously the races swarm
In their attempts at sovereignty and form.
They are our wards we think to some extent
For the time being and with their consent,
To teach them how Democracy is meant.
“New order of the ages” did they say?
If it looks none too orderly today,
‘Tis a confusion it was ours to start
So in it have to take courageous part.
No one of honest feeling would approve
A ruler who pretended not to love
A turbulence he had the better of.
Everyone knows the glory of the twain
Who gave America the aeroplane
To ride the whirlwind and the hurricane.
Some poor fool has been saying in his heart
Glory is out of date in life and art.
Our venture in revolution and outlawry
Has justified itself in freedom’s story
Right down to now in glory upon glory.
Come fresh from an election like the last,
The greatest vote a people ever cast,
So close yet sure to be abided by,
It is no miracle our mood is high.
Courage is in the air in bracing whiffs
Better than all the stalemate an’s and ifs.
There was the book of profile tales declaring
For the emboldened politicians daring
To break with followers when in the wrong,
A healthy independence of the throng,
A democratic form of right divine
To rule first answerable to high design.
There is a call to life a little sterner,
And braver for the earner, learner, yearner.
Less criticism of the field and court
And more preoccupation with the sport.
It makes the prophet in us all presage
The glory of a next Augustan age
Of a power leading from its strength and pride,
Of young ambition eager to be tried,
Firm in our free beliefs without dismay,
In any game the nations want to play.
A golden age of poetry and power
Of which this noonday’s the beginning hour.



Robert Lee Frost (San Francisco, 26 de marzo de 1874 - Boston, 29 de enero de 1963), fue un poeta estadounidense, considerado uno de los fundadores de la poesía moderna en su país por expresar, con sencillez filosófica y profundidad sentimental, la vida y emociones del hombre rural de Nueva Inglaterra. Gano 4 veces el premio Pulitzer en poesía. A pesar de que  paso 40 años como un desconocido. Murió de una intervención quirúrgica en la próstata, y fue enterrado en Vermont a la edad de 86 años. (1)  

 Obras: A Boy's Will (David Nutt, 1913; Holt, 1915). North of Boston (Norte de Boston) (David Nutt, 1914; Holt, 1914). Mountain Interval (Intervalos en la montaña) (Holt, 1916). Selected Poems (Poemas selectos) (Holt, 1923) New Hampshire (Holt, 1923; Grant Richards, 1924). Several Short Poems (Holt, 1924). Selected Poems (Holt, 1928).West-Running Brook (Holt, 1929). The Lovely Shall Be Choosers (Random House, 1929). Collected Poems of Robert Frost (Holt, 1930; Longmans, Green, 1930). The Lone Striker (Knopf, 1933). Selected Poems: Third Edition (Holt, 1934). Three Poems (Tres poemas) (Baker Library, Dartmouth College, 1935). The Gold Hesperidee (Bibliophile Press, 1935).From Snow to Snow (Holt, 1936). A Further Range (Holt, 1936; Cape, 1937). Collected Poems of Robert Frost (Holt, 1939; Longmans, Green, 1939) The Witness Tree (1942, premio Pulitzer)A Witness Tree (Holt, 1942; Cape, 1943).Steeple Bush (Holt, 1947).Complete Poems of Robert Frost, 1949 (Holt, 1949; Cape, 1951).Hard Not To Be King (House of Books, 1951). Aforesaid (Holt, 1954). A Remembrance Collection of New Poems (Holt, 1959). You Come Too (Holt, 1959; ) The Poetry of Robert Frost, (New York, 1969). Out Out,(Vermont 1964). Out Out,(Vermont 1964).Mending Wall (1914).Dust of Snow. Fire and Ice (2)




Los poemas seleccionados son El camino no elegido, The Road not Taken, de su libro NORTH OF BOSTON (1914),  quizá el poema más famoso de Frost. Sobre un tema común y universal, la elección. Aquí llama la atención que el titulo sea, El camino no elegido, porque perfectamente si uno toma un camino, el poema podría haberse llamado El camino tomado. Sin embargo, se puede interpretar como una selección de camino de apartarse de las multitudes, alejarse del mundanal ruido. En todo caso también hace alusión a la muerte, el camino no tomado, al elegir a la vida. Pero el viajero, en este caso, no tiene certeza de nada, va como un niño, con curiosidad, o con inocencia. En el camino puede ser favorable pero también puede ser un camino lleno de peligros y sobresaltos. Frost no da ninguna pista, el camino se convierte en un misterio, que solo quien lo recorre lo sabrá.   El segundo poema, también es muy citado y puesto en antologías. La reparación del muro. Mending Wall, de su libro NORTH OF BOSTON (1914). Retrata una situación común, dos vecinos que por mucho tiempo se han reunido  una vez al año, para reparar el muro que los divide. Puede ser una alusión a los diferentes puntos de vista, los problemas de segregación, razas, exclusión.  Un llamado a la coexistencia pacifica entre dos vecinos, que se aceptan como tales. Pero, el muro los une, y es buen trato repararlo para que no cause daño. Es un buen ejemplo de la buena vecindad. El respeto de la otredad.  Pero también ahonda en otra posibilidad, el proceso creativo y la elaboración de la poesía. Frost era un poeta fundado en tradición poética,  seguía las métricas y ritmos conocidos, evitaba el verso libre o blanco, que era el que estaba de moda, y usaban  la mayoría de los poetas de su tiempo.  En el poema el vecino es un alter ego del poeta, ambos luchan uno con la tradición y el otro por abolir la tradición poética. Ese proceso se da en la creación poética.  Y también hay un tercer nivel de interpretación,  ese muro que se da entre el poema  y lector. En ese enfoque, el lector queda en parte vedado a lo más íntimo del poema, de ahí la intención del lector por derribar el muro  o saltarlo , para ver algo que no esta a su alcance, la visión desde adentro del poema.   (3) El tercer poema Alto en el bosque una noche de invierno. Stopping by Woods on a Snowy Evening, de su libro NEW HAMPSHIRE (1923). Es una meditación sobre la vida, cuando hay peligro por las inclemencias del tiempo y en la noche el viajero se detiene, acampa y deje que llegue la claridad del día.  Siempre faltan millas por recorrer, nada nos es dado en su totalidad, siempre hay que seguir caminando. Borges llego a decir que ese poema era sobre la muerte. Y si, puede ser, pero también es sobre el estado inacabado de las cosas, siempre hay que  mejorarlas, perfeccionarlas, seguir luchando porque aún hay millas por recorrer…







THE ROAD NOT TAKEN

Two roads diverged in a yellow wood,
And sorry I could not travel both
And be one traveler, long I stood
And looked down one as far as I could
To where it bent in the undergrowth.




Then took the other, as just as fair,
And having perhaps the better claim,
Because it was grassy and wanted wear;
Though as for that the passing there
Had worn them really about the same.


And both that morning equally lay
In leaves no step had trodden black.
Oh, I kept the first for another day!
Yet knowing how way leads on to way,
I doubted if I should ever come back.



I  shall be telling this with a sigh
Somewhere ages and ages hence:
Two roads diverged in a wood, and I–
I took the one less traveled by,
And that has made all the difference.

EL CAMINO NO ELEGIDO

Dos caminos se bifurcaban en un bosque amarillo,
Y apenado por no poder tomar los dos
Siendo un viajero solo, largo tiempo estuve de pie
Mirando uno de ellos tan lejos como pude,
Hasta donde se perdía en la espesura;

 Entonces tomé el otro, imparcialmente,
Y habiendo tenido quizás la elección acertada,
Pues era tupido y requería uso;
Aunque en cuanto a lo que vi allí
Hubiera elegido cualquiera de los dos.



Y ambos esa mañana yacían igualmente,
¡Oh, había guardado aquel primero para otro día!
Aun sabiendo el modo en que las cosas siguen adelante,
Dudé si debía haber regresado sobre mis pasos.



Debo estar diciendo esto con un suspiro
De aquí a la eternidad:
Dos caminos se bifurcaban en un bosque y yo,
Yo tomé el menos transitado,
Y eso hizo toda la diferencia.




















Mending Wall

Something there is that doesn’t love a wall,
That sends the frozen-ground-swell under it,
And spills the upper boulders in the sun;
And makes gaps even two can pass abreast.
The work of hunters is another thing:


I have come after them and made repair
Where they have left not one stone on a stone,
But they would have the rabbit out of hiding,
To please the yelping dogs.  The gaps I mean, No one has seen them made or heard them made,
But at spring mending-time we find them there.


I let my neighbor know beyond the hill;
And on a day we meet to walk the line
And set the wall between us once again.
We keep the wall between us as we go.
To each the boulders that have fallen to each. And some are loaves and some so nearly balls
We have to use a spell to make them balance:


‘Stay where you are until our backs are turned!'


We wear our fingers rough with handling them.
Oh, just another kind of outdoor game,
One on a side.  It comes to little more:
There where it is we do not need the wall:
He is all pine and I am apple orchard.
My apple trees will never get across
And eat the cones under his pines, I tell him.
He only says, ‘Good fences make good neighbors.'


Spring is the mischief in me, and I wonder
If I could put a notion in his head:
'Why do they make good neighbors?  Isn’t it
Where there are cows?  But here there are no cows.



Before I built a wall I’d ask to know
What I was walling in or walling out,
And to whom I was like to give offense.
Something there is that doesn’t love a wall,
That wants it down.'  I could say ‘Elves’ to him,



But it’s not elves exactly, and I’d rather
He said it for himself.  I see him there
Bringing a stone grasped firmly by the top
In each hand, like an old-stone savage armed.


He moves in darkness as it seems to me,
Not of woods only and the shade of trees.
He will not go behind his father’s saying,
And he likes having thought of it so well
He says again, ‘Good fences make good neighbors.'
Reparar el Muro

Algo hay que no es amigo de los muros,
Que hincha la tierra helada a sus cimientos,
Que arroja al sol las piedras desde el borde
Y abre brechas por donde caben dos.
Lo que hace el cazador es otra cosa:



Lo he reparado tras seguirlo a donde
No ha dejado ni piedra sobre piedra
Persiguiendo al conejo a su guarida
Para animar al perro. Éstas son brechas
Que nadie ve formarse –no hay ni pista–
Pero en la primavera hay que enmendar.





Se lo anuncio al vecino tras la cuesta;
Luego, un día, en la línea divisoria,
Nos encontramos a rehacer el muro.
El muro nos separa mientras vamos.
A cada cual las piedras que le tocan.
Unas, óvalos, otras, casi esferas,
Las hechizamos para balancearlas:







"¡Quédense ahí hasta que nos demos vuelta!"



Nuestros dedos se agrietan al asirlas.
Cierto, es juego campestre, como tantos,
Uno contra otro. Para más no da:
Donde vivimos no hace falta muro:
Él es de pinos, yo de manzanares.
Mis manzanos no van a ir a comerse
Las piñas de tus pinos, le señalo.
Él responde, “Buen muro, buen vecino".





La primavera es travesura, y pienso
Qué podría meterle en la cabeza:
"¿Por qué «buen muro, buen vecino»? ¿No es. Eso una pauta para donde hay vacas?
Pero aquí no tenemos ni una vaca.




Antes de repararlo hay que plantearse
A quién uno va a incluir, a quién excluir,
Y quién puede acabar con un disgusto.
Algo hay que no es amigo de los muros,
Que los derriba”. Quiero decir “duendes”




Pero no son exactamente duendes,
Y prefiero que él sea quien lo diga.
Lo veo con una piedra en cada mano,
Como un salvaje troglodita armado.





La sombra en que se mueve me parece
Más que sombra de ramas o de selva.
No indaga el estribillo de su padre
Y tanto le complace recordarlo
Que repite, “Buen muro, buen vecino”.






Alto en el bosque en una noche de invierno

Robert Frost
Stopping By Woods On A Snowy Evening


Whose woods these are I think I know.
His house is in the village, though;
He will not see me stopping here
To watch his woods fill up with snow.



My little horse must think it queer
To stop without a farmhouse near
Between the woods and frozen lake
The darkest evening of the year.


He gives his harness bells a shake
To ask if there is some mistake.
The only other sound's the sweep
Of easy wind and downy flake.



The woods are lovely, dark and deep,
But I have promises to keep,
And miles to go before I sleep,
And miles to go before I sleep.

Alto en el bosque en una noche de invierno


Me imagino de quién son estos bosques.
Pero en el pueblo su casa se encuentra;
no me verá parada en este sitio,
ante sus bosques cubiertos de nieve.


Mi pequeño caballo encuentra insólito
parar aquí, sin ninguna alquería
entre el helado lago y estos bosques,
en la noche más lóbrega del año.


Las campanillas del arnés sacude
Como si presintiera que ocurre algo…
Sólo se oye otro son: el sigiloso
paso del viento entre los copos blandos.
  
Los bosques son hermosos, sombríos y profundos. 
Pero tengo promesas que cumplir,
y  mucho camino por recorrer ,
y  mucho camino por recorrer .





Notas bibliográficas

1. https://www.biography.com/people/robert-frost-20796091
2Wikipedia, Entrada Robert Frost.
3. Sobre las instrpretaciones del peoma el muro , como la tensión que se da en el proceso creativo y la frotera entre poema y lector,  se puede consultar el excelente artículo : El muro de Robert Frost,  Pedro Poitevin, Letras libres,  27 octubre 2014

Crédito poemas y traducciones.

Poemas en su original ingles . Selected poems of Robert Frost. Introduction Robert Graves Holt, Rinehart and Winston, INC.  Pages 23, 71, 140.

Traducciones

El camino no elegido, Ciudad Seva.
La reparación del muro, Versión del inglés de Pedro Poitevin a partir de una versión de Rhina Espaillat.Pedro Poitevin Lógico dubitativo. Poeta resignado. Profesor de matemáticas en Salem State University, en Massachusetts, EUA.
Alto en el bosque una noche de invierno. Ciudad Seva   

Crédito de fotografías


Foto de Robert Frost, File:Robert Frost NYWTS 4.jpg-Wiki Media Commons


Fotografías de Ansel Adams (1902-1984),  fotógrafo naturalista estadounidense.