En esta ocasión Plaza de las palabras, presenta el Ars poética de tres poetas latinoamericanos,
una especie de metapoesía del continente. No son los únicos poetas que han
escrito sobre poesía, en realidad casi todos lo hacen. La selección incluye trabajos de Vicente Huidobro, su
archiconocido y uno de los poemas vanguardistas más influyentes del siglo XX, Ars poética. A la par de Jorge Luis Borges, de quien incluimos, el poema
Ars poética, donde aborda muchos de
los temas que lo obsesionaban en sus ensayos y cuentos: el tiempo, la eternidad, los espejos. Y de Octavio Paz,
presentamos dos trabajos, uno el poema La
poesía, y otro a manera de texto, Hacia
el poema. Donde describe los puntos de partida para hacer poemas. Tres
grandes de la literatura mundial, tres grandes poetas y tres textos para la
reflexión poética.
Sin embargo, hay que señalar que esta tradición viene desde tiempos remotos, Primero. de La poética de Aristóteles. Segundo.
Horacio, con su trabajo Epístola a los
Pisones, conocida como Ars poética. El
ars poética, es en manera simple el arte de hacer poesía, las diferentes
formas, enfoques y formatos para elaborarla . En un sentido muy general todos los poetas tienen su propio Ars poético. En la cual se puede describir cuestiones técnicas, pero
sobre todo la visión poética del poeta para hacer sus poemas. Una especie de compendio, que ha pasado desde
la etapa preceptiva, prescriptiva hasta llegar al Ars poética, que encuentra su
máxima expresión en los poetas mismos, y su elección de convertir sus
teorías e impresiones sobre como hacer
poesía en poesía. (1) Esta modalidad
puede tomar la poesía misma, como lo hacen los poetas reseñados
latinoamericanos, pero también el ensayo. Las variantes son amplias desde la
preceptiva, hasta la vanguardia, como lo fue en su momento Ars poética de
Huidobro, hasta el estamento individual del Ars poética de Borges. Pero ademas hay otros poetas como Alfonso Reyes, Pablo Neruda, Jaime Torres Bodet y Mario Benedetti
que han escrito su Ars poética.
En un contexto general son
conocidos en lengua francesa el Ars poético de Verlaine, para quien “En la elección de tus palabras/Tienes que ser remiso:/Nada mejor que el
canto gris/Que une lo Indeciso a lo Preciso”. En lengua inglesa los elementos
críticos que aporta Byron en su magistral obra Don Juan, pero también los
ensayos críticos de Alexander Pope. Y el Ars poético del poeta norteamericano Archivald
Macleish, quien anunciaba: “Un poema ha
de ser palpable y mudo, /Redondo como un fruto (…) /Un poema no ha de tener
palabras, /Como un vuelo de pájaros”. En lengua alemana: De Herman Broch el poema Por ejemplo Whitman “Donde los tallos brotan, en el medio terrestre
del ser, / Allí se levanta la poesía: / Sin embargo, llega hasta la frontera
más externa de la vida, /Y ¡mira!, no está fuera, / Está en el alma. /Dentro la
frontera y fuera el medio, /Uno pariendo al otro, uno entretejido en el otro, /Sólo
esto es poesía…/Sin duda, al final descubres con sorpresa /Que es sencillamente
tu vida, /La vida del hombre”. De Rilke el poema “¡Oh, aliento, tú, invisible
poema!: ¡Oh, aliento, tú, invisible
poema!/Puro trueque jamás interrumpido/del propio ser y el espacio del mundo. /Equilibrio
en el que rítmicamente me sucedo. De Holderlin el poema A los jóvenes poetas: “Mis queridos hermanos, quizá va
a madurar/nuestro arte, tras un largo fermentar juvenil, /y llegará a lograr la
calma de lo bello; /no dejéis la virtud, imitad a los griegos. /A los dioses
amad, pensad en los mortales. /Ni ebriedad ni frialdad, ni descripción/ni
lección; si os asusta algún maestro, /pedid sólo consejo a la naturaleza”. (2)
La paleta cromática es amplia desde
las coordenadas que pasan por la
musculatura del vigoroso romanticismo con el ensayo En Defensa de la Poesía de P.B.Shelly, hasta el desgarro de la piel
del alma en El oficio del poeta, de
Cesar Pavese:
“Lo selvático que nos interesa no
es la naturaleza, el mar, la selva, sino lo imprevisto en el corazón de
nuestros compañeros hombres. Aquello que con un simple esfuerzo de atención
puede devenir voluntad deliberada. La ciudad, la mujer, gastan con nosotros una
ferocidad de la cual toda tierra salvaje es solamente un símbolo. Desastres e
intemperies nos encuentran resignados, nos dan la muerte, no desencadenan en
nosotros lo selvático, como hace la voluntad deliberada que a pasión contrapone
pasión. Lo selvático inventa palabras, se trabaja a sí mismo para aclararse en
palabras, que luego supuran por dentro y nos desgarran. Al principio es sólo
naturaleza: la ciudad es un paisaje, son rocas, alturas, cielo, claros
improvisados; la mujer es una fiera, una carne, un abrazo. Después se vuelve
palabras; lo natural era sólo un símbolo, y al conocer lo selvático verdadero,
hay que aullar”.
Pero tampoco desentonan las opiniones de los poetas sobre el arte de
hacer poesía, aunque no lo hayan plasmado, en un poema o un ensayo. Es muy conocida la caracterización del poeta John
Milton, sobre la poesía: sensual, sencilla y apasionada o la del poeta norteamericano Robert Frost: la
poesía debe ser una revelación o una serie de revelaciones, tanto para el poeta
como para el lector. En fin, esto del arte poético podría parecer algo ya superado,
considerase anecdótico o reflexionarlo como algo histórico; y aunque no hay un
recetario infalible para hornear el pastel poético; con todo el Ars poético cumplió,
cumple y seguirá cumpliendo su razón poética de ser: abrir y profundizar
la imaginación y mirada poética a la calle de enfrente pero con igual intensidad a la autopista de las
galaxias, como a la ciudadela del cosmos. En cuanto a las nuevas tendencias en el Ars
poética, vale pensar en esa hibridación inagotable que se da en los
contenidos de la poesía, que va desde los poetas metafísicos ingleses, quienes
creían que en una gota de agua cabía el universo entero a la poesía minimalista
o la sabiduría del haiku. Y en este inicio de siglo XXI, abrumado por los
cambio en la ciencia, tecnología, cultura de masas y nuevas formas de comunicación, que abren el espacio para ir ejercitando la
exploración poética. Si estamos en un mundo en reconfiguración, también arrastra
una reformulación de las aristas del arte, literatura y poesía. Si hay algo que se puede afirmar es que en la
poesía cabe la vida entera desde el átomo hasta el
cosmos, desde las miradas del alma, hasta el saludo de las piedras, desde el amor que mueve las estrellas hasta los
misterios milenarios de la naturaleza. Y
algo más que es insinuado en la poesía,
ese algo más que esta por ahí, y que siempre asoma y llega por la intuición
poética. Y que le hizo decir a Shelley que los poetas son las antenas del
mundo. Y a Keats, que son mejores las canciones aun no oídas. Una
perspectiva interesante, a manera de ejemplo, ya que el catálogo podría ser
innumerable, explora la poesía como un ejercicio espiritual.(3). Pero también, resultan ilustradoras,
las Ars poéticas desde la postmodernidad (4) y desde las tendencias en
un mundo global: la crisis de identidades en una cultura cada vez más mediática,
visual y mundial. (5).Y
el avance de la metapoesia, como subgénero. (6)
Vicente Huidobro
(1893-1948)
La poesía es como una llave, pero no cualquier llave, sino
una que abra mil puertas. Y al abrirse una de esas puertas, lo visto es creado como
un mundo nuevo, que da lugar al
creacionismo porque el poeta es un Pequeño Dios. Del cual Vicente Huidobro es uno
de sus Altos Centinelas.
Ars poética
Que el verso sea como una
llave
Que abra mil puertas.
Una hoja cae; algo pasa
volando;
Cuanto miren los ojos creado
sea,
Y el alma del oyente quede
temblando.
Inventa mundos nuevos y
cuida tu palabra;
El adjetivo, cuando no da vida, mata.
Estamos en el ciclo de los
nervios.
El músculo cuelga,
Como recuerdo, en los
museos;
Más no por eso tenemos menos
fuerza:
El vigor verdadero
Reside en la cabeza.
Por qué cantáis la rosa, ¡oh
Poetas!
Hacedla florecer en el poema;
Sólo para nosotros
Viven todas las cosas bajo
el Sol.
El Poeta es un pequeño Dios.
(1916)
Jorge Luis Borges
(1899-1986)
Jorge Luis Borges, (5) da
cabida a su Ars poética, bajo su sello muy personal, en contra de las
vanguardias, en las cuales el poeta es su único testamento o legado. Pero
Borges no solo tiene ese poema , varios otros hablan sobre el oficio del poeta
: “A
un viejo poeta” , “El otro tigre” , “Ariosto y los árabes” y “Arte poética” de El hacedor;, “Una rosa y
Milton” , “Lectores”, “A un viejo poeta sajón”, “A quien está leyéndome” ,” de El otro, el mismo. (6). El poema reseñado
está compuesto de 7 estrofas, en forma de cuartetos. En su
poesía privan los temores y obsesiones propias de los cuentos y ensayos del
Borges. Rio, tiempo, espejos, lo onírico, su amor clasicista con Ulises e Ítaca;
y su reverberación filosófica con
Heráclito. El poema, como toda la poesía ultraísta va de la mano y a plenitud con metáforas y símiles, y no faltan
tampoco los símbolos. El poema es un
río, el arte un espejo donde el poeta ve
su rostro. Todo fluye y también las palabras. Nadie lee dos veces el mismo
poema, por que todo cambia. Señala lo inmortal de la poesía contra lo finito de las cosas. Como también Keats proclamaba, ver al poeta en su estado mortal ante el canto
del ruiseñor universal.
Ars poética
Mirar el río hecho de tiempo
y agua
Y recordar que el tiempo es
otro río,
Saber que nos perdemos como
el río
Y que los rostros pasan como
el agua.
Sentir que la vigilia es
otro sueño
Que sueña no soñar y que la
muerte
Que teme nuestra carne es
esa muerte
De cada noche, que se llama
sueño.
Ver en el día o en el año un
símbolo
De los días del hombre y de
sus años,
Convertir el ultraje de los
años
En una música, un rumor y un
símbolo.
Ver en la muerte el sueño,
en el ocaso
Un triste oro, tal es la
poesía
Que es inmortal y pobre. La
poesía
Vuelve como la aurora y el
ocaso.
A veces en las tardes una
cara
Nos mira desde el fondo de
un espejo;
El arte debe ser como ese
espejo
Que nos revela nuestra
propia cara.
Cuentan que Ulises, harto de
prodigios,
Lloró de amor al divisar su
Itaca
Verde y humilde. El arte es
esa Ítaca
De verde eternidad, no de
prodigios.
También es como el río
interminable
Que pasa y queda y es
cristal de un mismo
Heráclito inconstante, que
es el mismo
Y es otro, como el río
interminable.
(1960)
Octavio Paz
(1914-1998)
Su Ars poética, “La poesía”, llega “silenciosa,
y secreta”. El poeta es un “solitario
combatiente contra invisibles huestes”. Para Paz la poesía es un espíritu:
“Espíritu que no vive en ninguna forma
/pero hace arder todas las formas”. Que nos recuerda el verso de Shelley, “un pájaro no es un pájaro /sino un espíritu”. Después
de varios giros, termina haciendo un símil entre la poesía y el sueño. Luego en “Hacia
el poema”, plantea en forma de reflexiones o aforismos, la santa trinidad:
el lenguaje, las palabras, y el poema.
La poesía
Llegas, silenciosa, secreta,
y despiertas los furores,
los goces,
y esta angustia
que enciende lo que toca
y engendra en cada cosa
una avidez sombría.
El mundo cede y se desploma
como metal al fuego.
Entre mis ruinas me levanto,
solo, desnudo, despojado,
sobre la roca inmensa del
silencio,
como un solitario
combatiente
contra invisibles huestes.
Verdad abrasadora,
¿a qué me empujas?
No quiero tu verdad,
tu insensata pregunta.
¿A qué esta lucha estéril?
No es el hombre criatura
capaz de contenerte,
avidez que sólo en la sed se
sacia,
llama que todos los labios
consume,
espíritu que no vive en
ninguna forma
mas hace arder todas las
formas-
Subes desde lo más hondo de
mí,
desde el centro innombrable
de mi ser,
ejército, marea.
Creces, tu sed me ahoga,
expulsando, tiránica,
aquello que no cede
a tu espada frenética.
Ya sólo tú me habitas,
tú, sin nombre, furiosa
substancia,
avidez subterránea,
delirante.
Golpean mi pecho tus
fantasmas,
despiertas a mi tacto,
hielas mi frente
abres mis ojos.
Percibo el mundo y te toco,
sustancia intocable,
unidad de mi alma y de mi
cuerpo,
y contemplo el combate que
combato
y mis bodas de tierra.
Nublan mis ojos imágenes
opuestas,
y a las mismas imágenes
otras, más profundas, las
niegan,
ardiente balbuceo,
aguas que anega un agua más
oculta y densa.
En su húmeda tiniebla vida y
muerte,
quietud y movimiento, son lo
mismo.
Insiste, vencedora,
porque tan sólo existo
porque existes,
y mi boca y mi lengua se
formaron
para decir tan sólo tu
existencia
y tus secretas sílabas,
palabra
impalpable y despótica,
sustancia de mi alma.
Eres tan sólo un sueño,
pero en ti sueña el mundo
y su mudez habla con tus
palabras.
Rozo al tocar tu pecho
la eléctrica frontera de la
vida,
la tiniebla de sangre
donde pacta la boca cruel y
enamorada,
ávida aún de destruir lo que
ama
y revivir lo que destruye,
con el mundo, impasible
y siempre idéntico a sí
mismo,
porque no se detiene en
ninguna forma
ni se demora sobre lo que
engendra.
Llévame, solitaria,
llévame entre los sueños,
llévame, madre mía,
despiértame del todo,
hazme soñar tu sueño,
unta mis ojos con aceite,
para que al conocerte me
conozca.
(1947)
(PUNTOS DE PARTIDA)
I
PALABRAS, ganancias de un cuarto de hora arrancado al árbol calcinado
del lenguaje, entre los buenos días y las buenas noches, puertas de entrada y
salida y entrada de un corredor que va de ninguna parte a ningún lado.
Damos vueltas y vueltas en el vientre animal, en el vientre mineral, en
el vientre temporal. Encontrar la salida: el poema.
Obstinación de ese rostro donde se quiebran mis miradas. Frente armada,
invicta ante un paisaje en ruinas, tras el asalto al secreto. Melancolía de
volcán.
La benévola jeta de piedra de cartón del jefe, del Conductor, fetiche
del siglo; los yo, tú, él tejedores de telarañas, pronombre armados de uñas;
las divinidades sin rostro, abstractas. Él y nosotros, Nosotros y Él: nadie y
ninguno. Dios padre se venga en todos estos ídolos.
El instante se congela, blancura compacta que ciega y no responde y se
desvanece, témpano empujado por corrientes circulares. Ha de volver.
Arrancar las máscaras de la fantasía, clavar una pica en el centro
sensible: provocar la erupción.
Cortar el cordón umbilical, matar bien a la Madre: crimen que el poeta
moderno cometió por todos, en nombre de todos. Toca al nuevo poeta descubrir a
la Mujer.
II
Hablar por hablar, arrancar sones a la desesperada, escribir al dictado
lo que dice el vuelo de la mosca, ennegrecer. El tiempo se abre en dos: hora
del salto mortal.
Palabras, frases, sílabas, astros que giran alrededor de un cetro fijo.
Dos cuerpos, muchos seres que se encuentran en una palabra. El papel se cubre
de letras indelebles, que nadie dijo, que nadie dictó, que han caído allí y
arden y queman y se apagan. Así pues, existe la poesía, el amor existe, y si yo
no existo, existes tú.
Por todas partes los solitarios forzados empiezan a crear las palabras
del nuevo diálogo.
El chorro de agua. La bocanada de salud. Una muchacha reclinada sobre su
pasado. El vino, el fuego, la guitarra, la sobremesa. Un muro de terciopelo
rojo en una plaza de pueblo. Las aclamaciones, la caballería reluciente
entrando en la ciudad, el pueblo en vilo: ¡himnos! La irrupción de lo blanco,
de lo verde, de lo llameante. Lo demasiado fácil, lo que se escribe solo: la
poesía.
El poema prepara un orden amoroso. Preveo un hombre-sol y una
mujer-luna, el uno libre de su poder, la otra libre de su esclavitud, y amores
implacables rayando el espacio negro. Todo ha de ceder a esas águilas
incandescentes.
Por las almenas de tu frente el canto alborea. La justicia poética
incendia campos de oprobio: no hay sitio para la nostalgia, el yo, el nombre
propio.
Todo poema se cumple a expensas del poeta.
Mediodía futuro, árbol inmenso de follaje invisible. En las plazas
cantan los hombres y las mujeres el canto solar, surtidor de transparencias. Me
cubre la marejada amarilla: nada mío ha de hablar por mi boca.
Cuando la Historia duerme, habla en sueños: en la frente del pueblo
dormido el poema es una constelación de sangre. Cuando la Historia despierta,
la imagen se hace acto, acontece el poema: la poesía entra en acción.
Merece lo que sueñas.
(1950)
Notas bibliográficas
1.Vital, Alberto. Arte poética en seis poetas latinoamericanos
del siglo XX. Alfonso Reyes, Vicente Huidobro, Jorge Luis Borges, Manuel
Bandeira, Pablo Neruda y Jaime Torres Bodet.versión impresa
ISSN 0188-2546. Lit. mex vol.22 no.1 México may. 2011
2. Broch,
Rilke,Holderlin Ejemplos sacados de José María Medina Esteban Metapoesía
en otras lenguas literarias:literatura alemana. 15 de octubre de 2012.
3. Breve y
sustancioso ensayo de Milton Medellín. La poesía como ejercicio espiritual.
Circulo de Poesía, Apizaco,
Tlaxcala, 27 de Junio del 2012. file:///E:/lecturas%2099/C%C3%ADrculo%20de%20Poes%C3%ADa%20_%20La%20poes%C3%ADa%20como%20ejercicio%20espiritual.html
4. Esclarecedor ensayo sobre la poesía y la postmodernidad, en que se
brinda una radiografía que va a desde la poesía light hasta los ciberpoetas. Carlos Fajardo Fajardo. Poesía y posmodernidad. Algunas tendencias y contextos (A propósito del
XI Festival Internacional de Poesía de Medellín, Colombia, 2001). Espéculo.
Revista de estudios literarios. Universidad Complutense de Madrid. El URL de
este documento es http://www.ucm.es/info/especulo/numero20/posmoder.html https://pendientedemigracion.ucm.es/info/especulo/numero20/posmoder.html
5. Marta López Luaces. La poesía latinoamericana actual recrea un mundo
plural y múltiple. Pagina web Tendencias 21. Tendencias literarias. Viernes, 9
de noviembre 2012.
6. Definición, Manifiesto y Decálogo de la Metapoesía
file:///E:/3%20ars%20vf/Metapoetas_%20Definici%C3%B3n,%20Manifiesto%20y%20Dec%C3%A1logo%20de%20la%20Metapoes%C3%ADa.html
7. Felipe Caldas Gómez. Sobre
Borges Arte Poética, Arte poética, 28 febrero 2015.
8. Sobre la Ars
poetica de Borges, leer Ramón Pérez Parejo Metapoesía y ficción en 'La luna' de
Borges. En quien da un catalogo más amplio y analítico de poemas de Borges sobre
el oficio del poeta. file:///E:/3%20ars%20vf/Metapoetas_%20Definici%C3%B3n,%20Manifiesto%20y%20Dec%C3%A1logo%20de%20la%20Metapoes%C3%ADa.html
Créditos
Poemas y texto
Poema Ars poética, Vicente
Huidobro. Poemas Vicente Huidobro, Plaza&Janes, pag.15, 1999
Poema Ars poética, Jorge Luis Borges. El Hacedor.
Alianza Emece, pag. 141.1981.
Poema La poesía,
Octavio Paz, Libertad Bajo Palabra, Ed. Cátedra,
Letras Hispánicas, España, 1998, 376p. (p. 163-165) [De “Calamidades y
Milagros”, 1937-1947].Página web Artes poéticas
Hacia el poema: Octavio Paz,
Libertad bajo palabra, Cátedra, Madrid, 1990. Página
web Artes poéticas
Fotografías
Fotografía de Vicente Huidobro, Análisis del arte poética de Vicente
Huidobro (por Mariel Vidal). Pagina web Alimenta tu mente.19 de mayo de 2009.
Fotografía de Jorge Luis Borges, Análisis del
poema “Arte poética” de Jorge Luis Borges.
Fotografía de Octavio Paz, http://www.biografiasyvidas.com/biografia/p/paz_octavio.htm
Ilustraciones por orden de
aparición
Mitología, Roberto Matta, 1980,
pintor abstracto chileno
Vuel Villa, 1936, Xul Solar,
pintor utopista argentino
Abrazo amoroso, 1949, Frida
Khalo, pintora naive mexicana
Volcan y noche estrellada, 1950, Gerardo
Murillo Cornado, conocido como DR. Atl, (Agua en náhuatl), geólogo,
vulcanólogo, ensayista y pintor paisajista mexicano
Mujer I, Thomas Daskan,
pintor norteamericano-chileno